La Omnología no es una corriente, ni una escuela, ni una religión. Es una forma de pensamiento que observa al Todo, lo acepta en su totalidad, y lo estudia sin fragmentarlo. Caos, orden, vida, vacío, conciencia, sistema, error, propósito, silencio… todo está incluido. Nada queda afuera.
Aquí encontrarás fragmentos, reflexiones, principios y estructuras que nacen de una sola convicción: el Todo se manifiesta en todo, y comprenderlo es el acto más alto al que puede aspirar una mente despierta.
La Omnología no pretende convencerte, sino confrontarte. No busca seguidores, sino conscientes. No entrega respuestas fáciles, sino un mapa sin leyenda para quien se atreva a trazar su propio camino.
Este espacio está reservado para ese pensamiento. Nada fuera del Todo puede entrar. Y tú, si estás leyendo esto, ya estás dentro.