OMNOLOGÍA

La Omnología no es una corriente, ni una escuela, ni una religión.
Es una forma de pensamiento que observa al Todo, lo acepta en su totalidad, y lo estudia sin fragmentarlo.
Caos, orden, vida, vacío, conciencia, sistema, error, propósito, silencio… todo está incluido. Nada queda afuera.

Aquí encontrarás fragmentos, reflexiones, principios y estructuras que nacen de una sola convicción:
el Todo se manifiesta en todo, y comprenderlo es el acto más alto al que puede aspirar una mente despierta.

La Omnología no pretende convencerte, sino confrontarte.
No busca seguidores, sino conscientes.
No entrega respuestas fáciles, sino un mapa sin leyenda para quien se atreva a trazar su propio camino.

Este espacio está reservado para ese pensamiento.
Nada fuera del Todo puede entrar.
Y tú, si estás leyendo esto, ya estás dentro.


  • Vacío

    «El vacío es la ausencia absoluta de cualquier cosa. Pero el vacío no es lo mismo que espacio, porque el espacio está atado al tiempo, y permite la distancia, los tamaños y los volúmenes. El espacio es moldeable por la materia, rodea la materia y la interpenetra. El espacio, por tanto, es parte del Todo porque existe y se le puede medir. Además, hay energía latente en el espacio. Por su parte, el vacío es inexistencia, es parte inequívoca de la Nada. Y al ser el vacío lo inexistente, lo inmedible, lo ausente, no es parte del Todo, no es, no tiene cabida ni en el espacio ni en el tiempo. El vacío es Nada, y, por ende, no existe».

  • Antinomia

    «El Todo tiene por antinomia a la Nada. Todo lo que existió, existe y existirá, es parte del Todo; y todo aquello que nunca fue, ni es ni será, es lo inexistente, es Nada. Hasta el espacio es algo, pero la nulidad de existencia es la Nada».

  • Orden

    «El Todo tiende al orden, al equilibrio. No hay un ‘por qué’ de las cosas, no hay un designio, una finalidad prescrita. Todo evento que en un principio conlleva al caos, gradualmente cae en la tendencia cósmica equilibradora. Que el Todo tienda al orden, no hace al orden ningún objetivo consciente, pensado ni preescrito, ni por nada ni por nadie; el orden es el resultado inevitable de todo evento, sea éste último caótico o no. Lo teleológico, por tanto, es irreal, un sinsentido, un intento por darle un objetivo o razón de ser de algo, algo que no se entiende su razón de existir».

  • Tautología

    «Tautología es repetir lo mismo sin aportar nada nuevo. ¿Qué tiene de nuevo la Omnología que lo haga diferente del monismo, naturalismo, o hasta taoísmo? Omnología es la ciencia del Todo».

  • Escape

    «Decir que algo es casual o azaroso, es otra forma de decir que no se tiene explicación del algo. Es casi como decir ‘sólo es’, o ‘porque Dios lo hizo’, o simplemente ‘que es infinito’. Es un escape intelectual a la propia ignorancia o incapacidad cognitiva, es tratar de dar respuesta a algo que no se entiende».